Pintá el exterior de tu casa como si fueras un profesional

Marina Gamba Marina Gamba
Diseño de interiores: imagen corporativa, interiorismo y arquitectura comercial. Especialidad: COLORES. Identidad visual corporativa, Interiores DECO Interiores DECO Study/office مصنوعی Brown
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El exterior de tu casa dice mucho de vos, ya que es uno de los aspectos más visibles de tu vida. Además, es lo primero que ves cuando llegas a tu hogar, por eso es lindo siempre tenerla en buenas condiciones. Sin embargo, no siempre es fácil. Las paredes del exterior sufren las inclemencias del tiempo y están en constante exposición al sol, por lo que su pintura suele arruinarse rápidamente. También muchas veces sufren raspones o rajaduras por distintas situaciones. Por esto, para mantenerla en condiciones, debemos pintarla con cierta regularidad.

El principal motivo por el que no hacemos esto es por los altos costos que esto implica. Los pintores profesionales suelen cobrar tarifas muy elevadas por este tipo de trabajos, y además es incómodo tener desconocidos trabajando en tu casa. Por eso, en este libro de ideas te damos una serie de consejos imperdibles para que puedas pintar el exterior de tu casa sin contratar a nadie. Aquello que puede parecer una tarea imposible de llevar a cabo es muy simple si tienes en cuenta algunos factores fundamentales, como el color y tipo de pintura, o cómo preparar la pared que debes pintar.

Si estás buscando inspiración, en homify tenemos cientos y cientos de fotos con diferentes estilos de casas para que te puedan inspirar y elegir el tuyo. Si además estás pensando en pintar el interior de tu casa, en este otro libro de ideas encontrarás todo lo que debes saber: Hágalo Ud. mismo: cómo pintar una habitación.

​Preparar la superficie

Para obtener un buen acabado es necesario que la pared este limpia y seca. Debe estar libre de polvo, hollín, grasa, aceite, alquitrán, etc. Todas estas sustancias impiden la adherencia y secado de la pintura. Es fundamental que también se encuentre libre de hongos y verdín. Para deshacerse de estos últimos limpie la superficie con lavandina y enjuague con abundante agua.

Si la pared ya está pintada y se encuentra en buenas condiciones, se las deberá lijar suavemente y luego eliminar el polvillo con un trapo húmedo. Si hubiera restos de pintura floja, deben ser eliminados totalmente con espátula, cepillo de alambre o viruta.

Para corregir las imperfecciones de la pared aplique enduído plástico para exteriores con una espátula y luego líjelo hasta emparejar totalmente la superficie. No olvide eliminar el polvillo con un trapo húmedo antes de pintar.

​Cómo elegir los colores

En última instancia, la elección del color para tu casa se reduce a tu gusto personal. Sin embargo, hay algunas cosas a tener en cuenta para no tomar la decisión equivocada y arrepentirte después.
Es importante tener en cuenta la impresión que querés que de tu casa: los colores blancos o claros dan impresión de pureza, cierta distinción y limpieza, los colores cálidos son acogedores y los colores naturales y tierra lucen más rústicos. Si el frentes es de ladrillos o piedras solo se aplican materiales transparentes y hasta con ciertas tonalidades, pero sin demasiada variación del color original de la mampostería. En este caso lo que podemos hacer es poner otros tonos en rejas, vigas o columnas. EL tipo de clima en el que vivas también debe ser un punto a considerar. Esto tiene que ver con lograr cierta armonía con tu entorno y además, aprovechar al máximo la luz y el calor: los colores recomendados para climas cálidos son tonos frescos y claros, en cambio para zonas frías son preferidos los tonos cálidos. Esto tiene que ver, entre otras cosas, con la relación con la luz solar. El blanco, y los colores claros en general, repele los rayos del sol, y hace que las paredes no se calienten demasiado, los ambiente internos se encuentran levemente más frescos. En general no se recomienda el uso de colores puros ya que pueden cansar rápido y lucir demasiados estridentes. Si queremos incorporar colores vivos al exterior de nuestro hogar, podemos pintar los marcos de puertas y ventanas, por ejemplo. Esto dará un toque de color sin saturar.

​Protejé pisos y muebles

Parte de la preparación a la hora de pintar es cuidarse de no marchar los alrededores. La pintura que se utiliza en los exteriores, por ser particularmente resistente, es muy difícil de sacar. Por eso es necesario recubrir con diarios o plástico el piso y los muebles o macetas que a veces tenemos en la entrada de nuestros hogares. Si las aberturas será de un color distinto que el resto, debemos recubrirlas con cinta de enmarscarar –esta cinta no descascara la pintura, por eso debemos utilizarla siempre-.

Pintura y herramientas

Cuando vayas a la pinturería, hay determinados elementos que no te pueden faltar. Primero, busca una pintura plástica para exteriores, látex acrílico, recubrimiento para exteriores o un producto similar que resista bien a la intemperie, de base acuosa del color que hayas elegido. También necesitarás rodillos y pinceles: ambos son necesarios, ya que los rodillos cubren amplias superficies y los pinceles son útiles para bordes y esquinas y es recomendable que sean de 5 a 8 cm. Procrurá que sean de buena calidad, ya que un pincel o un rodillo que pierdan pelo o que no absorban bien la pintura pueden arruinarte el acabo de tu pintura y generarte mucho más esfuerzo mientras estás pintando.

​Cómo pintar

Una vez que nos disponemos a pintar, si ya tenemos la superficie y alrededores preparados, es importante empezar de arriba abajo y no al revés.  Comience pintando los bordes (pared con zócalos y cantos internos de la pared) con un pincel de 5 a 8 cm de ancho y luego pintar  el resto con un rodillo. Antes de empezar,  humedecé el rodillo y escurrilo totalmente, eliminando el agua y fibras sueltas.

Entre una mano y otra de pintura, es importante esperar por lo menos cinco horas. Si el ambiente es húmedo, lo mejor es esperar aún más.

Si necesitas asesoramiento sobre la mejor forma de pintar la superficie de tu hogar, los profesionales de Bullk tienen mucho conocimiento sobre cómo hacerlo. Por ejemplo, en la casa que vemos en la imagen que ellos diseñaron lograron darle un color muy armónico con el medio. 

​El clima apropiado

Por último, es importante elegir bien el momento en el que pintaremos. La disponibilidad con la que contamos debe ser, por lo menos de dos o tres días, dependiendo del tamaño de la superficie que pintemos. Además, no debe estar pronosticado lluvia ni fuertes vientos. Por otro lado, es importante evitar el sol directo en la pared mientras estamos pintando, y también evitemos pintar luego del atardecer, ya que la falta de luz puede provocar que cometamos errores e imperfecciones.

Ahora sí, ¡manos a la obra!

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