Una casa suburbana soñada

Flor Ferraro Flor Ferraro
Casa El paso IV, ARRILLAGA&PAROLA ARRILLAGA&PAROLA Modern kitchen
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Hoy, te invitamos a adelantar las vacaciones y recorrer una vivienda suburbana cuyo diseño nos invita a permanecer relajados durante los 365 días del año.

El programa de necesidades de esta casa con impronta moderna se acomoda en dos niveles, ubicando en el nivel de acceso el área social y reservando para la planta alta el sector privado.

La volumetría exterior de la vivienda se define a partir de un zócalo de color gris que contiene el living, el comedor, la cocina y los servicios, y un prisma de color blanco que acomoda los dormitorios en la planta superior.

El ingreso destaca a partir de un vacío que los arquitectos realizan en el volumen superior de la casa y por el uso de la piedra natural como revestimiento del muro lindante con el garaje. Así, ubicados en el porche ingresamos a la misma a partir de un espacio de doble altura.

La casa es obra de los profesionales del estudio Arrillaga& Parola arquitectos que fue fundado en el año 2002 con sede en la ciudad de Santa Fe.

Te invitamos a recorrer los diferentes ambientes de esta casa que fue denominada por sus autores como Casa El Paso IV

Un comedor a los pies de la pileta

La casa se ubica en el Country Club El Paso (Santo Tomé, Provincia de Santa Fe) y su proyecto y ejecución se realizó durante los años 2011 y 2012.

El barrio cerrado donde se emplaza la vivienda tiene una extensión de 165 hectáreas y se ubica en el kilómetro 153 de la Autopista Rosario-Santa Fe. Además, el barrio cuenta con cinco grandes lagunas y está rodeado de una magnífica arboleda, lo que lo convierte en un lugar suburbano soñado para disfrutar en familia.

La imagen muestra la fachada posterior de la casa que abre hacia el jardín mediante grandes superficies vidriadas. Así, el comedor y el quincho -en planta baja- se expanden visualmente hacia el exterior. Los dormitorios -en el nivel superior – disfrutan de las mejores visuales del barrio a partir de ventanales amplios y corridos.

Al sector de la pileta se accede directamente desde el comedor o desde un espacio central distribuidor. Así, la gran pileta se percibe espacialmente como una continuación del ambiente interior que aloja al comedor.

Una cocina en blanco y negro

El espacio de la cocina se organiza a partir de una tipología lineal, cuyo espacio de trabajo se complementa con una isla central que acomoda el sector de cocción y un breakfast o comedor diario para cuatro comensales. Los bajo mesadas son de color blanco en contraste con la mesada de granito y las puertas de las alacenas que son de color negro. La cocina tiene franco acceso desde el jardín, a partir de puertas ventanas corredizas, y se ubica próxima al sector de pileta.

Completa el diseño interior de este ambiente la campana de acero inoxidable de forma cilíndrica que se ubica a modo de remate sobre la isla.

Una composición armoniosa para el comedor

Al igual que el resto de la vivienda, la caja arquitectónica que conforma el comedor principal es blanca y uno de sus planos verticales es totalmente vidriado. El comedor se concreta a partir de una gran mesa negra de líneas modernas que puede acomodar hasta ocho comensales. La misma se acompaña con un mobiliario moderno bajo para guardar vajilla y mantelería.

Completa la composición, un espejo con marco antiguo y tres lámparas colgantes –con terminación cromada- que definen una iluminación puntual sobre el plano de trabajo.

Destaca las visuales -hacia la pileta y el jardín frondoso posterior – que pueden apreciar los usuarios desde este espacio interior.

El toque de color

El espacio distribuidor se define a partir de una obra de arte que se ubica debajo de una pasarela que vincula los ambientes de la planta alta.

Arquitectura moderna

Una volumetría simple define la imagen exterior moderna de la vivienda.

El dato: uso del desnivel como límite virtual entre los ambientes

El living se encuentra próximo al comedor principal y se define a partir de un sillón de eco cuero negro en “L” que se acompaña por dos poltronas individuales y una mesa ratona de madera. Completa la escena una lámpara cromada de pie tipo arco y una serie de plantas naturales que se ubican de forma estratégica –aportando color y textura- en la ambientación del espacio.  

El ambiente que contiene al sector de living- comedor se delimita por medio de un desnivel en el piso que fue revestido con madera. Así, los arquitectos recurren al desnivel para establecer un límite virtual entre los ambientes.

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