4 Tipos de pavimento para exteriores ¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes?

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Elegir el tipo de suelo que irá en las regiones de afuera de nuestra vivienda no es una tarea fácil, además de que armonice con todos los colores y texturas a su alrededor, también deberemos tomar en cuenta que sea el correcto para hacer frente a las condiciones climáticas del lugar y que de ser necesario tenga una buena resistencia para soportar gran actividad, ya sea de personas o automóviles.

Aquí te presentamos 4 tipos de pavimentos con algunas de sus ventajas y desventajas para que puedas empezar a hacerte una idea de ¿cuál será ese material? que te ayudará a crear un exterior espléndido.

1. Piedra pizarra: tradición y sostenibilidad.

Los materiales usados actualmente demandan un fuerte componente de sostenibilidad que no siempre es cumplido, algunos ingredientes y procedimientos hacen de ciertos materiales usados en los suelos una gran fuente de contaminación, sin embargo siempre quedará la tradicional piedra pizarra que por su consumo de energía y agua en el proceso de producción resulta ser un material amigable con el medio ambiente, funciona además agradablemente no sólo en cubiertas que son su uso tradicional sino además en suelos, revestimientos, frentes y otros.

Como desventajas se pueden mencionar los costos, la necesidad de que se le haga un sellamiento periódico para evitar rayones sobre su superficie, así como en algunos casos la obligación de colocar un contrapiso debido a su peso. 

2. Tableta sintética de imitación madera.

La superficie limpia de la tableta de imitación madera aporta a esta terraza una apariencia de calidez y comodidad, su principal ventaja está ligada precisamente al efecto hermoso que crea, haciendo del lugar un entorno visualmente agradable,  funcionan muy bien para conservar un nivel de temperatura adecuado permitiendo adaptarse naturalmente a temperaturas muy altas o muy bajas, si su limpieza se hace periódicamente puede permitirnos incluso caminar cómodamente sin zapatos por toda la terraza, por lo demás la duración de este material es alta si se protege con los productos apropiados.

Una de las desventajas asociadas en el uso de este elemento en pisos es el posible ruido que se puede generar, aunque es menos ruidoso que un pavimento totalmente hecho de madera, no está de más ubicar algunas alfombras estratégicas que permitan mitigar que se pasen ruidos molestos a las plantas inferiores de la casa.

3. Hormigón: Economía y practicidad.

El hormigón de este jardín de un semblante más bien áspero en un color blanco define un pavimento clásico y elegante que adorna formidablemente la superficie de afuera de la piscina. Entre las principales ventajas de usarlo están que: es un material económico, puede moldearse o dársele una forma característica como se hace aquí en las orillas de la piscina, donde en contraste con los rectángulos del área principal, se arreglan pequeñas piezas cortadas con algunos márgenes curvos para conseguir rodear convenientemente la alberca. Por sus cualidades anti-deslizantes el hormigón se convierte además en el aliado perfecto de esta área en particular.

Sus propiedades térmicas por otro lado le hacen ideal en la captura de la luz del Sol en exteriores, además de que su solidez te permitirá mantener la tranquilidad por un buen tiempo sin temor a que en cualquier momento se quiebre. 

Entre sus desventajas se encuentran que aunque no es un material costoso si se requiere de una buena asesoría de profesionales con experiencia en su instalación debido a que de no implementarse bien luego es muy complicado enmendar  imperfectos.

4. Mantillos de piedra y listones de hormigón.

En exteriores las mezclas de materiales en pisos pueden resultar en bonitos senderos como el habilitado en el jardín a la entrada de esta casa. Aquí las ventajas están ligadas a la resistencia propia del hormigón y de las piedritas naturales, además de que su colocación en el camino demarcan un límite que ayuda a preservar las pequeñas plantas a los lados.

La desventaja principal en este tipo de concepto es que los mantillos de piedra pueden complicar un poco las tareas de limpieza porque las pequeñas piedrecitas pueden recoger polvo, hacer crecer musgo o perder su textura y color por cuenta de la suciedad. Para este caso en especial, es recomendable comprar o utilizar el aspirador de hojas que tengas en tu casa para eliminar impurezas, tomar piedras por secciones y lavarlas mediante una manguera aplicando lejía si es necesario para quitar manchas y cuidando de no derramar este producto en el follaje natural.

Otra solución más radical si no quieres complicarte haciendo el aseo de estos mantillos es irremediablemente cambiarlas por otro material que sin hacer perder el punto campestre de tu exterior te faciliten más la vida a la hora de hacer el mantenimiento.

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