¿Juego de comedor o juego con el comedor?

Mariana Belisario Blaksley Mariana Belisario Blaksley
Apartment Budapest, INpuls interior design & architecture INpuls interior design & architecture Dining room
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En este libro de ideas queremos recalcar que cuando del comedor se trata, tenemos mucha más libertad de la que creemos.

Y ya que hablamos de este ambiente, decidimos compartirles otro libro de ideas para cocinas y comedores integrados.

El comedor es ese lugar de nuestra casa en el cual juntarnos alrededor de la mesa con nuestra familia o amigos se convierte casi en un ritual. Con el ritmo de la vida moderna tiende a caer en desuso, ya que optamos por comer rápidamente en la mesa de la cocina o frente a la tele. Pero tenemos que reconocer que no hay nada más satisfactorio que compartir una comida increíble en una mesa espectacular y rodeados de nuestros seres queridos.

Puesto que en algunos casos no es un ambiente que utilicemos todos los días, hagamos de este espacio un lugar reservado para ocasiones súper especiales. Para ello debemos prestar especial atención al diseño del comedor y sacudirnos de encima algunos mitos.

El juego de comedor compuesto de sillas y mesa que se vende como un todo no es la opción aburrida que muchos creen. De la misma forma que mezclar sillas diferentes no es desprolijo, sino divertido. Y para los que no están del todo cómodos con estas dos soluciones, les presentamos un compromiso: sillas coordinadas y mesa que no forme parte del juego. 

Les mostraremos dos ejemplos de cada opción que demostrarán que las tres pueden ser muy atractivas. La decisión final depende no solamente del gusto de cada quien, sino de cuestiones prácticas, a veces. Quizás vemos un juego de comedor que incluye mesa y sillas a un precio increíble. O tal vez hayamos heredado distintas sillas y nos gustan todas. O tal vez nos enamoramos de esa mesa rústica, que venía sin sillas y decidimos combinarla con algunos clásicos tipo sillas Eames, Tulip o Eiffel. 

Sea cual sea el caso, lo que buscamos transmitir en este libro de ideas es que no hay reglas escritas y que si las hubiera pueden sentirse en total libertad de romperlas, en el afán de lograr un comedor que transmita nuestra personalidad, gustos e historia.

El caos en su expresión más canchera

Si en el fondo aún nos queda esa rebeldía de la adolescencia, esas ganas de romper límites y de no seguir reglas preestablecidas, esta solución satisfará nuestra necesidad de ser un poco irreverentes.

El espacio de la foto combina mesa rústica y banco, con dos sillas iguales para la cabecera y oras tres sillas para enfrentar al banco. El conjunto es audaz, atrevido y a la vez tiene un gran valor estético. 

El punto medio, coordinar las sillas más no la mesa

Fray Bentos, DRAA DRAA Dining room

Este intermedio resulta genial para quienes aún no se atreven a probar con un comedor que reúna varias piezas diferentes, pero que tampoco están convencidos con la idea de combinar las sillas con la mesa.

Una mesa de madera, con aires del pasado y líneas clásicas resalta aún más al juntarla con sillas modernas hechas de plástico. La mezcla de estilos en lugar de chocar, resalta las cualidades de cada uno en una simbiosis muy bien lograda. 

La pureza estética del juego de comedor

Muy especialmente si somos fanáticos del orden y más puristas en nuestra elección de muebles, la solución de comprar un juego completo de comedor es la indicada. 

Este impecable espacio de HOLACASA resalta de muchas maneras las ventajas de que las sillas y mesa sean del mismo modelo y enlaza todo el ambiente en un blanco impoluto que deslumbra. 

Descontracturando el comedor

Nuevamente les presentamos un ejemplo  más descontracturado que resulta expansivo y muy divertido.

La mezcla de materiales como habíamos comentado cuando se complementan entre sí resultan en una mayor riqueza de colores y texturas. Esta mezcla le confiere a nuestros espacios un aire creativo, original y juguetón. Casi diríamos que transmite una cualidad infantil. 

Llegar a un compromiso

Este segundo ejemplo de incorporar sillas que forman parte de un juego, con una mesa que no tiene nada que ver con ellas ahora nos presenta una opción adicional: sillas del mismo modelo pero en distintos colores. 

Esta ampliación de la paleta nos lleva un paso más allá, especialmente combinada con una silla rústica, de líneas y materiales más serios y sobrios. 

La calma que deriva de la uniformidad

Este espacio transmite inmediatamente una serenidad que se equilibra con la facilidad con la que fluye la energía entre living comedor, haciéndolo más dinámico.

Podemos apreciar más de cerca cómo elegir un juego completo de comedor, especialmente cuando tiene el valor estético de este fabuloso modelo, nunca podrá aburrirnos. 

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